lunes, 11 de septiembre de 2017

Cuentos: Tres rosas amarillas de Raymond Carver (1988)

El autor.-
Raymond Carver figura como un autor consagrado de la segunda mitad del siglo XX en la literatura estadounidense y por extensión en la anglosajona. Pertenece al movimiento llamado realismo sucio, una literatura de lo cotidiano que enfatiza lo más sórdido, relaciones familiares y conyugales alienantes y la fascinación por el minimalismo en la narración. Carver destacó como cuentista y también como poeta. Otras obras suyas: Catedral, De qué hablamos cuando hablamos de amor y Principiantes. 

Mi opinión.-
Pues esa temática y esa narrativa dura es lo que comparten seis de los siete cuentos de este libro. Las relaciones familiares o conyugales presididas por los silencios, el abuso, las traiciones y la cicatería respecto a las necesidades del otro. Y en casi todas ellas, como denominador común, está la imagen de un hombre pasivo, consciente del dolor que causa e incapaz de evitarlo. Por egoísmo, por inercia o por desidia emocional.

En Cajas esas relaciones alienantes entre adultos se producen entre madre e hijo. Una madre que está mudándose constantemente y que nunca encuentra su sitio y un hijo que la deja que deambule porque no le importa nada donde esté.

El teléfono es el elemento perturbador de las relaciones entre un matrimonio en Quienquiera que hubiera dormido en esta cama. El teléfono suena en medio de la noche y una mujer borracha pregunta por un hombre que no vive allí. Un matrimonio se desvela y mientras intenta coger otra vez el sueño ambos se hacen confidencias sobre sus frustraciones y su miedo a la muerte. Estos personajes que durante el día se dejan llevar por la inercia ante la llamada inesperada son capaces, al menos por un momento, de enfrentarse a su vida. Pero poco después vuelven a lo mismo.

En Intimidad un hombre, con cierto éxito literario, se enfrenta pasivamente al reproche de su exmujer. Ella se siente utilizada por el uso que el escritor hace de su intimidad cuando estuvieron casados; especialmente, de la intimidad más cruel, como si nunca hubiesen existido los buenos tiempos en su matrimonio. Él todo lo soporta, incluso se pone de rodillas, pero no hace nada más.

Menudo es un plato, una especie de cocido para los males del alma. Un hombre ha descubierto que su mujer le es infiel y esto supone que el amante de ella tenga que tomar una decisión que no había previsto. No esperaba que lo suyo pasase de una simple aventura. Pero ahora que el hombre engañado lo sabe el protagonista tendrá que decidir si abandona a su esposa o se queda con ella. Una vez más las circunstancias empujan a un hombre pasivo a tomar una decisión que hubiera querido evitar.

En El elefante un hombre carga con la responsabilidad de todos los miembros de su familia. Su hermano le sablea constantemente; también tiene que ocuparse de su madre enferma que desvía el dinero que él le da hacia el hijo sableador. Su exmujer depende de él y su hijo que todavía está en la universidad también. Su hija se casó pero su marido está en el paro y tienen dos hijos pequeños. Todos viven a su costa. Todos esperan que mejoren sus cosas para no tener que depender del hombre, pero nunca será así.

Caballos en la niebla es el final de una relación de pareja en la que, después de años de convivencia, el marido ni siquiera reconoce la letra de su mujer y pone en duda que la carta de despedida que ella le ha dejado la haya escrito ella misma.

Tres rosas amarillas es un cuento que se sale de la temática general de los otros. No está ambientado en los Estados Unidos ni en los años 1970-1980 sino en los últimos días de Chejov y en los pequeños detalles que rodean su muerte. Las rosas amarillas y el champán que ha pedido antes de morir, el corcho de la botella que ha caído por el suelo. Carver lo escribió cuando él estaba ya enfermo de cáncer y moriría poco después.

Aunque todos los cuentos transpiran tristeza y desaliento, no sumen a sus personajes en la desesperación sino que ellos aceptan, casi de buena gana, el absurdo y la dureza de la vida. Vistos en conjunto parecen un autorretrato del propio escritor. Muy recomendable. 


Tres rosas amarillas 
Raymond Carver 
Trad. Jesús Zulaika 

Ed. Anagrama 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Por favor, deja tu comentario