Mostrando entradas con la etiqueta Premio Booker. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Premio Booker. Mostrar todas las entradas

miércoles, 8 de febrero de 2023

Novela: La promesa de Damon Galgut (2021)

El autor.-
Damon Galgut nació en Pretoria y su vocación de escritor surgió durante una convalecencia por enfermedad cuando era niño. Pertenece a una familia blanca de clase alta de destacados juristas. Se le acusó por ello de haber llevado una vida privilegiada.  Otras obras suyas: Small Circle of Beings (1988), The Quarry (1995), In a strange room (2010). 

Mi opinión.-
Damon Galgut ganó el Premio Booker de ficción en 2021 con esta novela. También Coetzee, premio Nobel, lo ganó con Disgrace en 1999. Galgut ha reconocido la enorme influencia que tuvo esta novela en su escritura. A mí, La promesa, me ha recordado a la obra de Coetzee. Sobre todo en cuanto a la descripción de la posición de las mujeres en el mundo. Mujeres, destinadas u obligadas a arreglar/sufrir y purgar los pecados de los hombres.

Esta novela es muy original en su estructura y en la descripción de los personajes. En un mismo párrafo cambia constantemente el punto de vista y esto quiere decir que puede iniciar el párrafo uno de los personajes y continuarlo el narrador sin que apenas te des cuenta. Es una oscilación muy medida, entre la primera y la tercera persona pero que, si no estás muy atento, dificulta la comprensión del texto.

También es muy cinematográfica, desarrollándose en un gran plano largo que fuese enfocando un mismo hecho desde distintas perspectiva. Y que permite escrutar los sentimientos y pensamientos íntimos que los personajes no se atreven a manifestar, ni siquiera a sí mismos. Un travelling que, a veces, incluso estuviese protagonizado por Dios, visto como ese ojo aterrador inscrito en un triángulo. Y es que en muchas ocasiones esta narración de resonancias bíblicas adopta, como no podía ser de otra manera, ese tono de fatalidad que sólo se encuentra en la Biblia y es una fatalidad de la que no se puede escapar, a pesar de que los personajes lo intentan cambiando de religión.

Exige, por todo esto, una gran concentración por parte del lector y lectora y eso me gusta.  

En cierto sentido, la novela plantea la disolución de una familia blanca africana. Asistimos a la reunión de una familia para el entierro de cada uno de sus miembros. Los capítulos están titulados según el nombre del difunto y cada vez, lógicamente, se reúnen menos familiares para el funeral. En realidad, supone también un repaso a la historia del país en los últimos 30 años. La primera de estas muertes es la de la madre de familia producida cuando su hija pequeña es apenas una adolescente. La trama que une a las dos familias, blanca y negra, es la promesa hecha por esta mujer antes de morir a su criada, la propiedad de una casa en ruinas, promesa que el resto de la familia se negará a cumplir durante años y que supondrá el alejamiento de la hija pequeña hasta la resolución del conflicto.

Podría hacerse también una lectura simbólica de cómo los blancos desaparecerán sin que los negros tengan que hacer nada pero creo que resultaría demasiado maniquea. Ese estilo evanescente también recuerda a la narración cinematográfica. En cuadros, capítulos, separados por años de diferencia y centrados en la muerte de personajes blancos, mientras que los personajes negros no reaccionan. Están dominados por su pasividad, por la resignación o quizá por un manejo diferente del transcurso del tiempo, más dirigido a la supervivencia del clan o de la tribu que a la del individuo concreto. He comentado antes que Galgut fue criticado por haber llevado una vida privilegiada de blanco de clase alta y no haber sido capaz de transmitir la situación real de la República de Sudáfrica. Creo que con esta novela ha tratado de disculparse, aunque no sé si lo habrá conseguido por el escaso protagonismo que ha dado a los personajes negros. De ellos, situados en el centro de la trama por la promesa incumplida, nunca conocemos sus sentimientos ni pensamientos íntimos. Quizá porque esta no es su historia.


La promesa 
Damon Galgut
Ed. Libros del Asteroide
Traducción: Celia Filipetto



lunes, 4 de diciembre de 2017

Novela: El ruido del tiempo de Julian Barnes (2016)

El autor.-
Novelista británico reconocido y Premio Booker 2011. Se le encuadra en la corriente del posmodernismo literario donde predominan la metaficción y la autoficción, no hay una lógica cronológica en el desarrollo narrativo y tampoco un hilo conductor claro. A veces, incluso, se superponen fragmentos aleatoriamente hasta componer un relato coherente. Otras obras suyas: El sentido de un final, Arthur & George, Inglaterra, Inglaterra. El ruido del tiempo es su última novela. 

Mi opinión.-
En esta novela biográfica Barnes ha tratado de penetrar en la mente de Dmitri Shostakóvich para interpretar las decisiones que el compositor tomó durante toda su vida y su polémica relación con las autoridades soviéticas. Para ello utiliza como recurso narrativo el estilo indirecto libre, confundiéndose a veces, las voces del narrador y del personaje.

Lady Macbeth

Dmitri Shostakóvich había nacido en San Petersburgo en 1906. Cuando estalló la revolución rusa era un adolescente, prodigioso pianista y, aunque en un principio había sentido simpatía hacia la revolución pronto se desengañó. En realidad esta biografía ficticia de Shostakóvich le sirve a Julian Barnes para explorar los sentimientos más profundos de alguien que se siente constantemente en peligro. Especialmente en un ambiente político autoritario.

Sinfonía número 10, op 93

Si algo caracteriza a los regímenes autoritarios es su arbitrariedad y el desprecio con el que tratan al ser humano, con un sistema de castigos enormemente sofisticado como se dice en la novela. Así en esta novela, vemos a Shostakóvich convertido en un ser absolutamente neurótico. No sabemos si tenía esa predisposición o sólo se ha desarrollado por vivir y sentirse amenazado constantemente.

Shostakóvich
Se deja entrever que la colaboración de Dmitri Shostakóvich fue, al principio, forzada por las circunstancias y después se entregó ya totalmente. Sin embargo, queda la duda. Es lo que Julian Barnes pretende al diseccionar los pretendidos verdaderos pensamientos de Shostakóvich, que sigamos con esa duda porque, al fin y al cabo, no se trata de una biografía real sino de una ficción. En esa ficción, Shostakóvich sigue manteniéndose crítico con el régimen pero sigue colaborando con él. Ya no debería tener miedo puesto que es un compositor consagrado y no cabe que intenten vengarse con él, ¿o sí? Sus amigos han desaparecido en las sucesivas purgas stalinistas y eso no es fácil de olvidar. Por otra parte, su obra vuelve a ser apreciada dentro y fuera de la URSS. Si a cambio de todo eso sólo tiene que afiliarse al Partido Comunista, ¿qué hay de malo en ello?

Sonata para cello en D menor, op. 40

El tono de la novela es muy irónico. Eso refuerza la idea de que Dmitri Shostakóvich no fue captado por el régimen, aunque su biografía oficial lo afirme así. Pero, como ya he dicho antes, esto es ficción. ¿Quién puede conocer lo que realmente piensa otro y cuáles son sus motivaciones para actuar?

Sinfonía número 5

La novela también es una reflexión sobre la creación y lo condicionada que está por el poder. El poder autoritario y arbitrario o también el poder comercial del dinero. La creación pura no puede escapar a ninguno de los dos. 


El ruido del tiempo 
Julian Barnes 

Trad. Jaime Zulaika

Ed. Anagrama 

jueves, 26 de septiembre de 2013

Novela: Posesión de A.S. Byatt

Sinopsis.- 
A través de una carta hallada por casualidad, Roland y Maud, investigadores universitarios, empiezan a descubrir la relación amorosa entre Randolph Henry Ash y Christabel Lamotte, dos poetas victorianos. Reconstruirla con todos los vestigios que van encontrando influirá en sus vidas.

La Autora.-
Antonia Susan Byatt es profesora de literatura inglesa y norteamericana, Dama de la Orden del Imperio Británico, Caballero (sí, caballero) de la Orden de las Artes y las Letras de Francia y Premio Booker por esta novela. Ángeles e Insectos es otra de sus novelas que, como Posesión, también ha sido adaptada al cine. 

Mi opinión.-
Creo que ya he comentado en otra entrada, cuánto me gustan las novelas estructuralmente complejas, con saltos en el tiempo, diferentes puntos de vista y que requieren la implicación absoluta del lector o lectora, que de alguna manera te consideran un personaje más. Son novelas que establecen un juego muy particular entre autor y lector, una complicidad especial. En esta novela se alternan voces y estilos diferentes, dos romances separados por un siglo, intriga y novela de suspense, humor británico y también unos toques de crítica ácida (very british) sobre la actividad académica y los estudios literarios. 

Roland Mitchell arrastra una vida acomplejada, es licenciado en literatura inglesa y tiene un trabajo precario. Comparte su vida con Val, que también estudió literatura, pero trabaja como secretaria. Su relación potencia frustraciones, resentimientos y complejos mutuos, pero no son capaces de terminarla. Siguiendo una investigación para el profesor Blackladder, Roland encuentra los borradores de unas apasionadas cartas, sin destinatario, escritas por el poeta Randolph Henry Ash. Decide continuar su investigación sin comunicarlo a nadie y así conocerá a Maud Bailey.

Maud Bailey se ha especializado en la obra de Christabel Lamotte, poetisa de la misma época que Ash, minusvalorada en su tiempo y que ahora es un icono de feministas y lesbianas. Maud es hermosa y de cabello muy rubio, algo que oculta debajo de un turbante; de buena familia, muy comprometida con su trabajo y con dificultades de relación. 

Randolph y Christabel, los poetas, fueron amantes clandestinos; él estaba felizmente casado. Sumergirse en su vida, a través de las huellas que fueron dejando, sirve para que Roland y Maud reconstruyan la suya. En esa reconstrucción utilizarán los poemas y las cartas personales de Randolph y Christabel y para aquello que los amantes dejan en silencio, los investigadores encontrarán las voces de quienes les conocieron, y es que por muy reservados que seamos y aunque lo hagamos de manera inconsciente y mínimamente, siempre dejamos huella en los otros. Consultan también el anodino diario de Ellen Ash (la esposa del poeta) que parece decir más de lo que escribe; el diario atormentado de Blanche Glover, amiga o amante de Christabel; y también el diario de Sabine de Kercoz (prima de Christabel) que será decisivo para averiguar qué pasó con ella durante los meses que estuvo desaparecida y que además expresa las dudas e inquietudes del aprendizaje del oficio de escribir. 

Uniendo todas estas piezas, llega un momento en que el lector o lectora sabe más de la historia de los poetas que los investigadores mismos. Desde este punto de vista, obtenemos un trato preferencial por parte de la autora; así nos considera sus iguales. 

Además la novela también es una lectura sobre la minusvaloración de las mujeres. Val y la profesora Beatrice Nest, a finales del siglo XX, han visto frustradas sus carreras, como Christabel Lamotte fue ignorada en el siglo XIX. La inercia (masculina) en la manera de abordar lo que debe ser objeto de conocimiento, impide valorar las alternativas o nuevos enfoques que las mujeres pueden aportar; el dominio de los hombres sobre qué o quién debe ser objeto de conocimiento ha supuesto el desprestigio de la visión de las mujeres sobre lo humano. Por esta razón, nadie cree que el trabajo que Val escribe sobre el poeta Ash sea suyo; por esta razón, el profesor aconseja a Beatrice Nest que estudie los aspectos más domésticos de Ellen Ash; y por esta misma razón, Maud, debe ocultar su pelo, atractivo y referente sexual, para ser tomada en serio. 

Diferentes estilos para todas estas historias entretejidas. El misterio de los amantes y la investigación casi policial; la pasión de su aventura impregna la vida de Roland y Maud, cien años después; las dificultades y las rivalidades en el ámbito académico tienen forma de guerra de baja intensidad en la que los americanos (y su opulencia) derrotan siempre a los británicos (y sus bajos presupuestos). Y también hay sitio para el humor y las situaciones esperpénticas, como todos los personajes convergiendo al final de la novela en un cementerio inglés, en una noche de tormenta y con árboles amenazadores.

He leído en una entrevista como Byatt aborda los primeros trabajos sobre una novela. En esta, concretamente, los colores tuvieron siempre mucha fuerza. Cada personaje está asociado a un color que le define en su personalidad más profunda y compleja: Maud y Christabel y el color verde; Roland y el color blanco. Pero además la autora también "colorea" el proceso de creación de la novela: al principio, era una red grisácea de pensamientos, de fantasmas y poemas; después, la idea de la posesión empezó a tomar protagonismo y el color se convirtió en negro con pinceladas de carmesí; al incorporar el mundo de las hadas, los bosques encantados y la conquista de un ideal, se introdujeron en la novela los tonos verdes y dorados. Me parece que no hay manera mejor de explicar esta novela. Desde luego ha sido la lectura más intensa de todo el año 2013.



Posesión
A.S. Byatt
Traducción de María Luisa Balseiro
Ed. Anagrama

jueves, 29 de agosto de 2013

Novela: El Asesino Ciego de Margaret Atwood

Sinopsis.-
Iris Chase pertenece a una familia que en otro tiempo fue poderosa. En Avilion, la mansión familiar, transcurrió su infancia y juventud y la de su hermana Laura, considerada una escritora de un cierto renombre y que murió trágicamente. Después de ser diagnosticada de una enfermedad coronaria y presintiendo que llega el final, decide compartir su historia y poner orden en los acontecimientos que marcaron su vida. 

La autora.-
Margaret Atwood es canadiense, escritora muy reconocida y también activista y militante de Amnistía Internacional. Ganó el premio Booker con esta novela y en el 2008 también fue Premio Príncipe de Asturias de las Letras; además ha estado nominada al Premio Nobel. Considerada una escritora feminista, se ha dedicado en su obra, también, a detallar la identidad canadiense y sus relaciones con Estados Unidos y Europa.

Mi opinión.- 
El asesino ciego es de esas novelas que obliga al lector a “coescribirla” junto con la autora, porque insinúa mucho más de lo que cuenta. Margaret Atwood va esbozando situaciones, callando recuerdos y dejando pistas y piezas para que podamos montar el puzzle. Es una novela complicada, con mezcla de distintos tiempos y estilos narrativos. Me gustan estas novelas que te obligan a leer despacio; sientes que precipitarse puede hacerte perder detalles vitales para entender la historia. 

En la trama principal la anciana Iris Chase rememora la historia de su familia, ligada a la mansión Avilion, y especialmente las relaciones con su hermana Laura y su personal manera de ver las cosas y sentir la vida. Siempre evocando ese tiempo pasado, recordando, en un ajuste de cuentas con ella misma y aprovechando la nostalgia para describir su decadencia actual. Se añaden a esta trama principal, noticias publicadas en la prensa local, notas de sociedad sobre la familia de Iris Chase, que ayudan a situar en el tiempo la trama; son la versión edulcorada de lo que pasaba en la casa. 

Más que un tono nostálgico lo que predomina es el remordimiento, por las consecuencias que tienen nuestras elecciones. Elecciones que nos parecen apropiadas en un momento, pero que al cabo de un tiempo pasan factura y somos conscientes del precio pagado. También queda patente la sensación de lo poco que pueden hacer las mujeres para tomar el control sobre su vida y cómo, cuándo lo hacen, son excluidas del orden social: Iris acepta el matrimonio que su padre le prepara para salvar el negocio familiar; Iris acepta el sexo con su marido para darle un heredero; Iris se rebela y abandona a su marido pero pierde el derecho de ser madre; Iris quiere saber qué pasó con su hermana y encuentra una historia de abuso y violencia dentro de su propio hogar.

Entremezclada con esta trama y narrada en presente, asistimos a los encuentros clandestinos entre dos amantes. Esta historia novelada es considerada una obra maestra de Laura Chase (hermana de Iris), muerta en un confuso accidente y escritora que va ganando fama a lo largo de los años. El hombre y la mujer no tienen nombre. Se encuentran en distintos lugares, pensiones más o menos sórdidas, siempre con la angustia de ser descubiertos. No sabemos si esta aventura es ficción o recuerdo. Ella es de buena familia y él alguien que está siendo buscado por la policía, por algún suceso violento relacionado con la política o la lucha obrera. 

En estos encuentros, el hombre le cuenta a su amante la novela que está escribiendo, El asesino ciego. Es una novela de ciencia ficción y aventuras con un cierto estilo pero literatura pulp, para ganarse la vida hasta que pueda encontrar algo mejor. Según se va desarrollando la trama descubriremos que es una historia basada en la realidad y en Alex Thomas, joven activista político que mantuvo una relación triangular con las hermanas y terminó muriendo en la Guerra Civil Española.



El Asesino Ciego 
Margaret Atwood
Traducción: Dolors Udina
Ed. Zeta