lunes, 31 de diciembre de 2018

Palencia. Camino de Santiago (2018)

Visitar la exposición de Las edades del hombre. Mons Dei me parece una buena excusa para ir a sitios a los que de otra manera me resultaría más difícil acercarme. Hace tiempo que quería visitar el románico palentino, del cual siempre me habían hablado muy bien y he aprovechado esta ocasión. Y no me ha decepcionado, aunque siga prefiriendo el románico oscense. Vinculación sentimental. 

Esclusas del Canal de Castilla. Frómista
Aprovechando que íbamos en bus hicimos varias etapas del Camino de Santiago palentino y paramos en tres de sus localidades principales. Por supuesto que no cuenta como peregrinación pero fue una ocasión para poder observar con más detenimiento unas portadas magníficas y también unas esclusas del Canal de Castilla prácticamente iguales a las esclusas de Casablanca del Canal Imperial de Aragón. De todas maneras me quedan pendientes muchas más rutas por esta zona ya que en la montaña palentina quedan unas 100 iglesias, ermitas y monasterios románicos. Se explica este gran número porque fue, durante los siglos XI y XII, una zona muy rica, para después sufrir una gran crisis, motivo por el cual, apenas existen muestras del nuevo estilo de moda, el gótico.


Empezamos por Frómista y su iglesia de San Martín del siglo XI, mandada edificar, como parte de un monasterio desaparecido, por doña Mayor de Castilla, hija de un conde castellano y reina consorte de Pamplona. Durante el siglo XII, perteneció a la abadía de Cluny. A partir de entonces y según las necesidades de cada época se le añadieron diferentes construcciones que se han reproducido en una maqueta, situada dentro de la iglesia, donde se aprecia también el estado de ruina al que llegó durante el siglo XIX y se puede comparar con la polémica restauración que se hizo entre 1896 y 1904. En este enlace, se puede ver la maqueta en 3D

Cabecera y fachada este. Iglesia de San Martín de Tours


 
Canecillos y ajedrezado jaqués
Es una iglesia de planta basilical con tres naves y muy luminosa gracias al cimborrio octogonal. En la parte de atrás de esta iglesia, encontré este canecillo tan curioso. García Omedes en su magnífica página web, www.arquivoltas.com, la llama contorsionista que sujeta una figura infantil. Yo juraría que es una mujer pariendo aunque el niño resulte un poco grande pero la verdad es que la veía desde bastante lejos. También se puede ver detalles de la decoración en ajedrezado jaqués, poniendo de manifiesto la influencia del románico oscense y que, posiblemente, los canteros que trabajaron en Jaca se desplazaron también a trabajar en Frómista.

¿Parturienta o contorsionista?


En la fachada sur, destacan las dos torres circulares por ser elementos no muy habituales en el románico peninsular que servirían como campanarios y también como torres de vigilancia puesto que la frontera con al-Ándalus no estaba lejos en el siglo XI.

Albergue en Villarcázar de Sirga. Regentado por la Orden de Malta
Seguimos con Villarcázar de Sirga, a 5 km. de Carrión de los Condes. Nos habríamos perdido esta visita si no hubiera sido por la guía porque pasa desapercibida comparada con el resto del Camino de Santiago y no debería ser así, especialmente por su iglesia bajo la advocación de Santa María la Blanca. 

Iglesia de Santa María la Blanca
Pórtico cubierto por la ojiva y detalle de los frisos superiores


Es una iglesia templaria y parece que, aparte de su interés arquitectónico e histórico, es un nodo de energía telúrica. Se construyó en el siglo XIII, influida por la sobriedad del Císter. En realidad, es una iglesia fortaleza como corresponde a su vinculación con una orden militar. Su pórtico tiene unas dimensiones espectaculares, en su parte superior hay un doble friso con un pantocrátor y un apostolado protogótico muy similar al que después vimos en Carrión y el de la parte inferior está dedicado a la Asunción. Está protegido por una ojiva con problemas estructurales que unos tirantes tratan de paliar, tal y como se puede ver en la foto.


El interior puede considerarse gótico. Destacan tres sepulcros góticos en una capilla lateral, añadida en el siglo XIV, dedicada a Santiago Apóstol y donde se encuentra la talla de la Virgen de las Cantigas de Alfonso X. Esta capilla está iluminada por un rosetón que, lamentablemente, no tiene vidrieras, si no sería espectacular. Los sepulcros pertenecen al infante Felipe de Castilla, hermano de Alfonso X, a su segunda esposa, Inés, y a un caballero de la Orden de Santiago, Juan de Pereira.

Rosetón en la capilla de Santiago

Sepulcros en la capilla de Santiago y Virgen de las Cantigas



En el retablo del altar mayor también conviven diferentes estilos ornamentales. El calvario es el más antiguo, las tres tallas góticas datan del siglo XIV. Las tablas que constituyen el retablo son hispanoflamencas de los siglos XV y XVI y en el centro se puede observar esta pequeña talla de la virgen blanca también del siglo XIII; la predela, sin embargo, es renacentista del siglo XVI. A pesar de sus diferentes orígenes constituyen un todo armónico.

Retablo Mayor y detalles


La tercera parada de este camino fue Carrión de los Condes. Nos quedó tiempo para ver tres edificios, aunque en dos de ellos no pudimos acceder al interior. La iglesia de Santa María del Camino es un edificio románico de mediados del siglo XII; el pórtico sur está protegido por un atrio y es donde se conserva un friso más sencillo que el de Villarcázar de Sirga. En las arquivoltas se sitúan personajes desarrollando oficios de la época y las jambas lisas terminan en dos cabezas de toro cada una de ellas. Y es que para salvaguardar la paz entre cristianos y musulmanes durante la Alta Edad Media, aquéllos debían entregar 100 doncellas cristianas a los reyes moros. Las cuatro doncellas que debía entregar Carrión se encomendaron a la virgen y ésta envió en su lugar a cuatro toros que embistieron a las tropas musulmanas que acampaban a las afueras de la ciudad. Se fueron, claro.


Iglesia de Santa María del Camino y detalle del Pórtico con los toros



Más interesante es el friso sobre el Apocalipsis de San Juan de la Iglesia de Santiago construida en el siglo XII, situado sobre la portada de medio punto. En la arquivolta de este arco de medio punto hay una variedad importante de oficios de la época: músicos, un herrero judío y otro personaje que acuña monedas; y como oficio reservado para las mujeres: una plañidera y una contorsionista.

Iglesia de Santiago y detalle del friso



La plañidera

Músico

La contorsionista

El herrero judío
A las afueras de Carrión se encuentra el Monasterio de San Zoilo, fundado ya antes del 948, aunque no se conserva nada de esta época. En el siglo XIV tuvo que ser reconstruido y a mitad del siglo XIX, después de una vida azarosa, pertenecía a los jesuitas que lo convirtieron en un colegio y posteriormente en noviciado. En 1992, comenzó su uso actual, complejo hotelero.

Galería del claustro y detalles platerescos



Hoy, lo que se considera más valioso es el claustro. Proyectado en 1537 por Juan de Badajoz y construido en 1604. Destaca su galería de personajes importantes, eclesiásticos y laicos, en medallones, bustos y escudos: pontífices, cardenales, santos y monjes; reyes, reinas. Nada dedicado al pueblo llano. Mucho habían cambiado las cosas desde los tiempos del románico cuando los oficios más humildes eran dignos de representación en las partes principales de las iglesias, junto a Dios. Pero para recordar que no todo es pompa y esplendor en este mundo, en las pilastras que dan a la galería exterior las calaveras recuerdan al oficio de difuntos.

Peregrinos 


En Carrión también nació el Marqués de Santillana. Este es un resumen de aquel día de Camino de Santiago especial. Sobre románico palentino aún queda mucho más y Camino también.



jueves, 27 de diciembre de 2018

Exposición: Pasión por Zaragoza. El reino de los sentidos. 2018


Los años que terminan en 18 parece que son de especial relevancia para la inmortal ciudad de Zaragoza. Si no viviéramos en una época que aspira a ser tan políticamente correcta, se hubiese conmemorado con mayores fastos la reconquista de la ciudad por parte de tropas cristianas, en 1118. No lo digo porque sea islamófoba, al revés. Admiro mucho la cultura árabe y la arabización de la península trajo momentos de esplendor y también decadencia por esto creo que debería de tener más relevancia en la educación de niños y jóvenes españoles, porque es parte constitutiva de nuestra historia. Tanto como lo fue la pertenencia al Imperio Romano.



No digo que tuviera que celebrarse con fiestas y orgullo cristiano-patrio, pero sí organizar congresos de historia, reproducir las condiciones de vida antes de 1118, hacer un repaso del incipiente reino de Aragón con ciudad principal en Jaca y también estudiar las alianzas con otros reinos y condados, como Castilla o Lérida, que contribuyeron a la reconquista. Palabra maldita últimamente.


Cerámica siglo XI


En fin, parece que para compensar se ha pensado esta exposición que, además, es la última de la trilogía dedicada a la historia de la construcción de la Zaragoza contemporánea. Con el hilo conductor del 18, se examinan brevemente acontecimientos que tuvieron lugar en años terminados en esos dígitos. Aunque, el año 1818 ha quedado fuera con la excusa de que ya se hizo una exposición dedicada exclusivamente a la invasión napoleónica, los sitios y la guerra de la independencia. No me parece lógico que se haya pasado por alto.


Detalle de la reproducción del olifante de Gaston de Bearne. 

En esta exposición, pues, se conmemoran ocho centenarios, grandes momentos para la ciudad y sus habitantes que han conformado la identidad que hoy compartimos con orgullo y también con decepción. No sólo se pueden ver obras de arte. Pintura y escultura, cerámica y tejidos se combinan también con vinilos en paredes y suelo que reproducen mapas y los modos de vida y que sirven de conductores para cada época. Pero también se llama el reino de los sentidos porque se han incorporado a la exposición la música, el tacto y también el olfato.


Reproducciones de El barranco de la muerte y de una torre de asalto

Sobre la vieja ciudad romanizada de origen ibero, Salduie, los romanos erigen Caesar Augusta, en el año 14 a.C, la única ciudad del imperio que ostentaba el nombre completo del emperador. Llegó a ser una ciudad importante para el imperio. Protegida en su lado norte por el río Ebro y circundada en los otros tres por una muralla de la que todavía quedan restos. Además de protección el río Ebro regaba las huertas junto con los ríos Huerva y Gállego. Una ciudad eminentemente comercial y con derecho a acuñar moneda propia.


Nuestra Señora de la Consolación y la Virgen del Ligallo


Después de la caída del imperio romano, los visigodos ocuparon la ciudad. En el año 472, el conde Gauterico incorporó la ciudad al reino de Toledo. Antes de esta sustitución, la ciudad ya era una referencia para los cristianos perseguidos. San Valero obispo había sido desterrado y Santa Engracia y los innumerables mártires también habían sucumbido. En el santuario de Santa Engracia existió una escuela y una gran biblioteca regida por San Braulio donde venían a estudiar prelados del reino de Toledo.

Libro Registro de las marcas y señales del ganado. Notario Martín Maza de Lizana, 1722



Pero también a los reinos visigodos les llegó su final y en 711 comenzó la invasión musulmana. Sólo en 15 años se había conquistado la mayor parte de la península. A Zaragoza llegaron en el 714. Saraqusta, Medina Albaida, la ciudad blanca se convierte entonces en capital de la provincia norte de al-Ándalus. Desde los Califatos omeyas de Damasco y Córdoba hasta la taifa independiente saraqustí del 1018, transcurrieron años convulsos. Mundir I fue el primer rey de Saraqusta y dio origen a la dinastía Tuyibi que en el año 1039 fue sustituida por la dinastía Hudi.


Fernando el Católico y detalles



La sala dedicada a la taifa está perfumada de azahar para recordar los naranjos que todavía hoy viven en el patio de Santa Isabel de la Aljafería y se pueden ver allí objetos de cerámica a la cuerda seca que no se habían expuesto hasta ahora.


Isabel la Católica y detalles



En 1118 se produjo la conquista cristiana de la ciudad (esa que deberíamos haber conmemorado este año). Los reyes de Aragón querían dominar el valle del Ebro y se buscaron como aliados para conseguirlo al rey de Castilla Alfonso VI y al vizconde Gastón de Bearne que terminará siendo el primer señor de la ciudad. Del vizconde puede verse en la exposición una réplica del olifante de marfil.


Busto relicario de Santa Engracia, 


En esta pequeña sala se ha reproducido en vinilo el cuadro de Agustín Salinas El barranco de la muerte, cuyo original puede verse en el Palacio de Sástago. Verse es mucho decir puesto que está en una zona bastante mal iluminada, si no fuese así podría apreciarse mejor. También hay una reproducción a escala de una torre de asalto como las utilizadas para la conquista de Jerusalén. Este cuadro siempre me ha impresionado por la frialdad y la desolación que representa. Se supone que el ejército cristiano ha vencido pero los soldados y el rey sólo muestran cansancio por tantas guerras. Muy interesante.


Benedicto XIII entre dos cardenales de la obediencia de Avignon. Siglo XV



En 1218, cincuenta años antes de la creación de la Mesta castellana, el rey Jaime I el Conquistador nombró un justicia con jurisdicción civil y criminal para dirimir los pleitos relacionados con la ganadería y que ha llegado hasta hoy en forma de fundación. Tenía horca propia; hoy, ya no. Se muestran en esta sala diversos documentos, uno de ellos con el sello de cera más antiguo que se conserva con la firma del rey, y también el trono donde se sentaba el justicia.


Nuestra Señora de Zaragoza la vieja, finales del siglo XIII


Nuestra Señora del Burnao, tercer cuarto del siglo XIV

Seguimos con el año 1318. Doscientos años después de su reconquista el obispado de Zaragoza se transformó en arzobispado a instancias del rey Jaime II. El 18 de julio de ese año mediante la Bula Romanus Pontifex se creó la provincia metropolitana de Zaragoza de la que dependían los obispados de Huesca, Jaca, Tarazona, Albarracín, Pamplona y Calahorra. Se pueden contemplar en esta sala los bustos relicarios de los principales patronos y santos de estas ciudades. Me quedo, sin dudarlo, con el busto de alabastro de Santa Engracia y el cáliz del Compromiso de Caspe.


Planta de los cimientos del Pilar. Felipe Sánchez, 1695

Hay también dos oleos de los reyes católicos, acompañados cada uno por uno de sus hijos y que pertenecen a la Iglesia de Santa María de los Corporales de Daroca. Estas dos tablas son preciosas por el detalle y el colorido con el que están realizados. Después damos un salto en el tiempo hasta llegar a 1518 (se ve que en 1418 no pasó nada reseñable). En 1518, Carlos I fue jurado como rey de Aragón en La Seo, siendo ungido por el arzobispo de Zaragoza. Sería el último de los reyes españoles en seguir esta tradición.


Réplica de uno de los leones del Puente de Piedra.


La pieza estrella de la exposición, desde mi punto de vista, es un cuadro que representa a Benedicto XIII, el papa-antipapa Luna, entre dos cardenales de la obediencia de Avignon que está en restauración y que, antes, era identificado como San Pedro. También son muy interesantes las tallas de las vírgenes románicas y góticas, especialmente la de Nuestra Señora de la Consolación, de principios del siglo XIII, virgen de la capilla de Jaime I. Tiene una expresión tan dulce y risueña que mirarla produce felicidad. Nada que ver con la desdeñosa expresión de la Virgen del ligallo de la primera mitad del siglo XVI. También está la virgen del Burnao de Jaca o Nuestra Señora de Zaragoza la Vieja. Se exponen también los Estatutos Fundacionales de la Universidad de Zaragoza, creada en 1618 y un plano original con los cimientos de la basílica del Pilar erigida en 1718, pero nada de 1818.


Blasón de Zaragoza, 1520

Darío Siserol y Agustín Serra se han ocupado de recrear los olores y paisajes sonoros de cada una de las épocas y para animar el sentido del tacto se han dispuesto unas cajas con diferentes objetos dentro que pueden identificarse fácilmente. Para no perdérsela porque además tiene programadas muchas actividades para niños y adolescentes.


La ciudad de Çaragoça, 1592
Francisco Miranda


Pasión por Zaragoza. El reino de los sentidos
Patio de la Infanta. C/ San Ignacio de Loyola 16, Zaragoza. 
Hasta el 29 de enero de 2019